ALFOMBRAS PARA SALONES DE ESTILO NÓRDICO: las aliadas perfectas
Las alfombras para salones de estilo nórdico son las aliadas perfectas para aportar ese punto de calidez que requieren los hogares confortables y evitar el error más repetido en los ambientes de estilo nórdico, caer en el aburrimiento y la frialdad.
Hecha la advertencia anterior, personalmente he de decir que me encuentro muy a gusto en ambientes de estilo nórdico, porque me resultan muy relajantes y serenos. Además, pienso que el estilo nórdico es perfecto para salones grandes, como el de la fotografía principal de este post, y también para salones pequeños, como los que te muestro en otras fotografías.
Por tanto, si tú también quieres decorar tu salón dentro de estilo, creo que te resultará muy fácil, e incluso divertido, elegir la alfombra para tu salón teniendo en cuenta 4 pautas muy sencillas que te voy a explicar. Obtendrás un resultado muy atractivo que no sólo estará de plena de moda hoy, sino que también lo estará en el futuro.
1º) Visualiza la alfombra dentro del salón completo
Al elegir cualquier alfombra es muy importante que la visualices dentro del entorno en el que va a ser colocada, y en los salones de estilo nórdico, caracterizados por poco mobiliario y de líneas ligeras, esto es todavía más importante, ya que la alfombra cobrará más protagonismo que en otros estilos decorativos.
Ten en cuenta el color del suelo (que en la mayoría de las ocasiones será de madera), el color de las paredes (en el que predominará el blanco y otras tonalidades neutras) y el color de los sofás y sillones, que también en la mayoría de los casos será de tono neutro. Busca una alfombra que entone con la gama cromática del conjunto, pero que no llegue a mimetizarse hasta “desaparecer” y aburrir.
Seguro que lo puedes conseguir con alfombras sencillas, lisas o casi lisas, en las que el toque diferencial no viene tanto de su color como de su textura original, o con alfombras de motivos geométricos en las que predominen las tonalidades neutras.
Asimismo, presta atención a detalles de mobiliario como las patas de sillones o de mesas auxiliares de centro, ya que, como te explicaré más adelante, te pueden dar la clave para elegir la alfombra perfecta para ese entorno.
2º) Enriquece las alfombras lisas para salones de estilo nórdico con texturas llenas de personalidad
Cuanto más lisa sea la alfombra y su color esté menos contrastado con la tonalidad predominante en el resto de elementos del salón, más importante es que su textura tenga personalidad.
Alfombras de fibras naturales para salones de estilo nórdico
En general, las alfombras de fibras naturales son perfectas como alfombras para salones de estilo nórdico. En particular, en el caso del salón de la fotografía principal de este post, el color tostado de la alfombra supone un contrapunto relajado al color más oscuro del suelo de tarima y su textura combina perfectamente con la de los sillones del fondo o el macetero cilíndrico de ratán. Es decir, se consigue un conjunto muy armonioso y equilibrado, que es una de las características principales del estilo nórdico.
Alfombras para salones de estilo nórdico con nudo grueso
En el salón de la fotografía que te muestro a continuación, se ha utilizado una alfombra de color beige de nudo grueso. El color beige de la alfombra crea un ligero contraste con el gris del sofá y de los sillones, y con el color miel del haya del suelo y los listones verticales separadores. Pero en mi opinión, lo más relevante que aporta la alfombra es el contraste entre su textura con relieve y con irregularidades, y la textura completamente lisa y regular del resto de piezas de mobiliario y del suelo.
3º) Explora el potencial de los pequeños detalles de tu mobiliario y encuentra un nexo de unión con tu alfombra
Este ejercicio de exploración que te propongo, a la hora de elegir alfombras para salones de estilo nórdico, te puede resultar muy divertido y puede aportar un toque realmente diferencial a tu salón.
Como no hay nada mejor que un ejercicio práctico para entender una idea, te propongo que estudiemos las dos fotografías que he seleccionado a continuación. Vamos a seguir jugando con el color de la alfombra en relación a su entorno, pero ahora no vamos a prestar tanta atención a su textura sino a su greca o a su ligero estampado, que estarán conectados con el color y la forma de algún elemento de mobiliario.
Alfombra de keplan: ¿qué te parece el conjunto de la greca marrón y las patas de hierro de la mesa?
La alfombra de este salón es una alfombra vinílica y en concreto es una alfombra de keplan. Este tipo de alfombras resulta enormemente práctico y resistente, ya que cualquier mancha se pueden lavar en el acto pasando una simple bayeta.
Como puedes comprobar, el color tostado del centro de la alfombra delimitado por la greca marrón oscura, aportan el marco perfecto para la mesa auxiliar de centro, cuya bandeja superior también es tostada y cuyas patas son rectilíneas y de hierro oscuro, en perfecta armonía con la greca de la alfombra.
Alfombra de apariencia rústica: ¿te gusta la combinación del zig-zag negro de la alfombra con las patas de los sillones?
La alfombra de este otro salón, para alguien ajeno al interiorismo, podría resultar una elección arriesgada y un poco fuera de sitio. Para mí, es una elección magistral.
Por una parte, la alfombra rompe el formalismo del salón, aportando un punto desenfadado y rústico, gracias a su diseño sencillo y a sus flecos largos. Por otra, resulta coherente dentro del salón, gracias a su ligero estampado con una línea negra en zigzag sobre el fondo color hueso, que da continuidad a las patas metálicas curvas de los dos sillones de cuero.
4º) Convierte el salón con mobiliario más sencillo y ligero en un “salón 10” con una alfombra de estampado geométrico
Para que entiendas esta última recomendación he seleccionado dos fotografías que muestran dos salones o zonas de estar bastante pequeños y con mobiliario sumamente sencillo.
Como podrás comprobar, la impresión que transmiten los dos ambientes es cálida y positiva, y cuando los ves no percibes ni su tamaño reducido ni la falta de calidad de su mobiliario, sino que prevalece la sensación de luz, confort y conjunto cuidado. En ambos es fundamental la alfombra seleccionada, como te explico a continuación.
Alfombra de franjas horizontales con estampado geométrico
En el pequeño salón de la fotografía superior, el juego del estampado geométrico de las distintas franjas de la alfombra consigue vestir el espacio, que, de otra forma, dada la escasez de mobiliario y elementos ornamentales, quedaría frío y desnudo. Fíjate también en el juego de colores neutros de la alfombra, que evitan que ésta “pese” demasiado dentro del conjunto.
También llamo tu atención sobre el tándem perfecto que forman la alfombra y las persianas venecianas de lamas blancas con cinta decorativa.
Alfombra con estamapdo geométrico de romboides
Para terminar, en la fotografía de arriba te muestro el efecto que consigue una alfombra de estampado geométrico con combinación de romboides de distintos colores.
Aunque los colores predominantes son el blanco y el gris-antracita, son fundamentales los pocos romboides de color mostaza que hay, ya que consiguen elevar la temperatura visual del ambiente.
Fíjate en la perfecta coordinación entre el estampado de la alfombra y el ligero estampado del papel pintado de la pared del sofá, con una retícula geométrica de efecto tridimensional. Para terminar, observa la importancia de pequeños detalles como la colección de láminas, los sillones de mimbre, los cojines o las dos estanterías colgadas. Todo está pensado para lograr un conjunto ligero y equilibrado.
Espero que este artículo sobre alfombras para salones de estilo nórdico te haya resultado de interés y utilidad.
Si quieres profundizar sobre cualquiera de los aspectos tratados en el post o ver y tocar alfombras para tu salón de estilo nórdico, no dudes en contactar con nosotros o acercarte a nuestra tienda-estudio del Pº de la Chopera 190 de Alcobendas. ¡¡¡Te esperamos en “entrecolores”!!!.